jueves, 22 de julio de 2021

Una mirada al contexto regional

 

U.N. Sede Manizales: Jornada Temática
Una mirada al contexto regional


Gonzalo Duque Escobar*

Manizales, Julio 22 de 2021.

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Preámbulo

La Ecorregión Cafetera colombiana ubicada en el centro de los Andes más septentrionales de Colombia, con 92 municipios de 5 departamentos, en jurisdicciones que se reparten sobre las vertientes de la Cordillera Occidental y Central de Colombia, y como tal en las hoyas centrales del Cauca y Magdalena, y cuenca alta del San Juan, es una construcción social e histórica cuyo singular carácter se explica por la condición mediterránea y biodiversa del territorio, y por los procesos pluriculturales emprendidos en cada una de sus subregiones desde la Conquista y la Colonia, como también a partir de la colonización antioqueña del Siglo XIX, por una población en continuo mestizaje. Como referente, el Gini de la tierra en la ecorregión, supera el 0,8, contra el 0,46 para el Ingreso, y la pobreza monetaria que al 2019 afectaba a cerca del 30% de la población, con la pandemia ha ido en aumento.

Introducción

Imagen 1: El Medio Ambiente: y la Cultura: interpretando a Augusto Ángel Maya. In: Fundamentos de CTS

El Medio ambiente que inicialmente es un medio fundamentalmente natural, gracias a la cultura, puede ser transformado y constituirse finalmente en un medio paranatural, ecológicamente sólido.

La ecología es la ciencia que se estudia los seres vivos y su relación con el hábitat.
Un ecosistema, es el conjunto de relaciones entre las comunidades de organismos vivos y el medio ambiente que habitan.

Los ecosistemas, pueden ser acuáticos o terrestres: los primeros cuando habitan mares, costas, lagos, ríos, y humedales, y los segundos cuando se ubican en el relieve emergido, sobre montañas, planicies, valles, desiertos o glaciares.

De otro lado, la cultura, donde se incluyen saberes, valores y creencias de un grupo social, incluye los medios materiales y organizacionales que desarrollan las comunidades para garantizar la pervivencia y el desarrollo.

En el caso caldense, estos temas son relevantes por dos razones: desconociendo el carácter mestizo del territorio, hemos invisibilizando el  fundamental aporte cultural de nuestras comunidades negras e indígenas en un propósito perverso de “blanquear la raza”, y la producción literaria de la provincia, e igualmente venimos degradando el medio ambiente presionado la estructura ecológica del territorio, a tal punto que en el Índice de Competitividad Nacional 2019, con una nota de 3,63/10 en sostenibilidad ambiental, por degradación en Caldas somos los terceros entre los 32 departamentos  de Colombia.

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El territorio

Imagen 2: Ecorregión Cafetera (IDEAM)- Estructura Ecológica y Comunidades Étnicas (SIR)

Este escenario deforestado que, para preservar el agua y la biodiversidad, debe partir de la recuperación de las cuencas, yendo más allá de sus escenarios naturales más sobresalientes, como lo son el PNN de los Nevados, lugar donde también se establece el Complejo Volcánico Ruiz-Tolima, y los cerros de Tatamá y Caramanta con su majestuosidad como elementos del corredor biológico de la cordillera Occidental; súmense los valles de los ríos Risaralda y La Vieja, y del Magdalena Centro, y el sistema de páramos al sur de Sonsón y norte de Roncesvalles con sus fértiles tierras, y finalmente la Selva de Florencia como ecosistema biodiverso de significativa belleza escénica.

Lo anterior, teniendo en cuenta que dicho patrimonio enfrenta amenazas, ya que después de la pérdida de guaduales, bosques de niebla y bosques secos, lo que se expresa con la sedimentación que padecen nuestros grandes ríos de Colombia, continúa la agroindustria de base química con los monocultivos y la contaminación, como amenaza para la pervivencia de la cultura y los ecosistemas.

La cultura

Imagen 3: Umbra: la Ecorregión Cafetera en los mundos de Samoga. U.N. de Colombia.

Permítanme esta descripción de la Ecorregión del Eje Cafetero, visto desde la cultura con una visión aristotélica, conformado por cuatro escenarios, así:

 Por el Mundo de la Tierra, Pachamama: el occidente minero como territorio triétnico y colonial de marimbas, currulaos, resguardos, carnavales y negritudes; y además una subregión panelera con arquitectura de tapia pisada y vocación minera: en el oro existe más novela y poesía que en el café.

Por el Mundo del Agua, Bachué: el oriente caldense en la subregión magdalenense del bosque de Florencia con su patrimonio hídrico excedentario; es la tierra del bunde, de ranchos de hamacas, chinchorros y subiendas, de la historia de la boga y los vapores por el río, y de la Expedición Botánica.

Por el Mundo del Aire, Yuruparí: la subregión Cafetera donde el aroma de la tierra del café cubre los dos ejes de la colonización antioqueña; es la tierra de guaduales y yarumbos, o del bambuco, de las chivas, del bahareque de guadua, y de los cables y ferrocarriles cafeteros.

Por el Mundo del fuego, Chiminigagua: la alta cordillera con sus volcanes y nevados, páramos, bosques de niebla y fértiles tierras; un espacio cuyos íconos son el cóndor y la palma de cera, para la tierra del pasillo, los caminos empalizados y de la ruana de Marulanda y el sombrero aguadeño.

Desafío ambiental

Imagen 4: Eje Cafetero: escenarios de cambio climático al 2100, por departamento. IDEAM (2015).

Si al 2000, en la ecorregión la superficie apta para potreros que es del 4% alcanzó el 49% y el potencial forestal que es del 54% fue del 19%, habrá que resolver los conflictos de uso del suelo al enfrentar dicha vulnerabilidad frente a la amenaza del cambio climático. Para dicho reto, urge un apropiación del territorio e implementar estrategias de ciencia y tecnología imbricadas con la cultura, mediante la traducción de los saberes populares en los términos de la ciencia moderna, y cerrar la brecha de productividad entre los medios rurales y urbanos al incorporar los desarrollos tecnológicos requeridos para el trópico andino en el marco de un desarrollo sostenible, donde la amenaza ambiental debe contemplar, además del cambio climático, las dinámicas agroindustriales, mineras y urbanas, apalancadas por un modelo de desarrollo pensado para el crecimiento económico a costa de los derechos bioculturales del territorio, máxime cuando la legislación ambiental se ha adaptado más a las demandas del mercado que a los intereses del Estado.

La economía

Imagen 5: PIB del Eje Cafetero 2010: dinámica y estructura de la participación. Javier Mejía y DANE 2012.

Si la participación en el PIB 2010 del Eje Cafetero, fue del 4,1% del PIB nacional, en Caldas donde la participación alcanzó 1,7%, las cuantías fueron del 55% para el sector terciario, 25% para el secundario, 14% para el primario y 7% para los impuestos, dando como resultado un percápita de US 5500, contra U$ 8100 de la nación. Y aunque se hayan dado crecimientos importantes en algunos momentos y para algunos sectores, el PIB caldense entre 2004 y 2014 creció en promedio 2,6%, contra una media nacional anual del 4,8% para el mismo período. Cabe entonces preguntase ¿en cuáles sectores y actividades económicas, tienen la región y Caldas posibilidades de crecimiento?

Para empezar, eso es posible si se parte de los siguientes elementos: a- del potencial minero-energético de Caldas señalado en el respectivo Plan 2006-2016, subrayado por 120 explotaciones y depósitos de minerales de 220 que posee el Eje Cafetero, según el Inventario Minero de Ingeominas (1972), acompañado de un desarrollo hidroenergético responsable; b- de la posición geoestratégica de La Dorada y del corredor del Cauca para la implementación de un sistema intermodal de carga en la región Andina, si se desarrollan la hidrovía del Magdalena y el sistema ferroviario; c- de los beneficios derivados de la declaratoria del Paisaje Cultural Cafetero PCC como Patrimonio Cultural de la Humanidad; d- de los beneficios del Aeropuerto del Café con alcance transoceánico, equipado de una plataforma logística y como nodo articulador de las américas; y e- de la conformación de la Ciudad Región del Eje Cafetero en el marco de una revolución urbana.

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Desarrollo minero

Imagen 05: Caldas: Licencias y titulaciones en Extractivismo minero. Biomas y usos del suelo, en Corpocaldas.

El Plan Minero Energético de Caldas 2006-2016, rescata la existencia de filones de oro interesantes en Manizales, Manzanares, Marmato, Riosucio y Supía, y agrega que de las jaguas de los beneficios y de las gangas de las explotaciones de estos y otros lugares -caso Pensilvania y Samaná-, se podría obtener apreciables cantidades de sulfuros de zinc, de plomo, de hierro, de cobre, de antimonio y de arsénico, o de zinc metálico y sus derivados. Y sobre el manganeso de Apía y Viterbo, el yacimiento minero-metálico más importante de la región, urge su eventual aprovechamiento. Similarmente, señala la existencia de arenas silíceas de alta pureza en cuarzo (SiO2) en Pueblo Rico y el Valle del Cauca, y posiblemente en el distrito minero Riosucio-Supía-Quinchía, a las que sumaría las de Cerro Bravo, materiales que podrían explotarse y complementarse con otras de Antioquia y Tolima para implementar industrias de transformación en silicato de sodio, sílice-gel y carburo de silicio. Adicionalmente, entre los principales prospectos se incluyen materiales calcáreos al anunciar que parece inferirse una inmensa cadena de yacimientos de calizas en el oriente caldense, que parte desde el centro de Tolima y llega al nordeste de Antioquia, al igual que los existentes en la otra vertiente de la cordillera entre Manizales y Aguadas. De estos yacimientos de caliza y mármol obtenidos de las dos franjas calcáreas que recorren a Caldas de Sur a Norte, aforando su calidad, dispersión y cantidad, podrían proveerse materias primas para una industria de carburo y fosfatos fertilizantes, misma que en un plano de mayor nivel de desarrollo daría origen a plantas de acetileno, cianamida, cloruro químicamente puro y cemento.

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La hidrovía del Magdalena

Imagen 6: Hidrovía del Magdalena y Corredor Férreo del Cauca - Cuenca del Magdalena-Cauca.

En la gran cuenca del Río Grande de la Magdalena, que cubre el 24% del territorio continental de la Nación, se requiere resolver problemáticas como la sedimentación por deforestación como factor que diezma complejos de humedales y causa el blanqueamiento de corales, lo que explica el desbordamiento del río, una problemática que sumada a la contaminación por aguas vertidas y no tratadas desde centros urbanos, y por 1200 minas de aluvión que usan mercurio, además de actividades agroindustriales con su huella hídrica verde, impactan sin medida las poblaciones rivereñas y destruyen el ecosistema íctico en la cuenca del Río Grande y el Caribe. Con la intermodalidad soportada en trenes y la hidrovía del Magdalena extendiendo la navegación al Tolima Grande, sin comprometer derechos bioculturales del territorio, gracias a una reducción de los costos de transporte del 40 al 50%; entonces, por la nueva carga de importaciones y exportaciones generada, con un polígono industrial de commodities minero-energéticos, se generarían 100 mil empleos en Colombia y el PIB crecería el 1,7%.

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El Ferrocarril Cafetero

Imagen 7: Red férrea nacional (Geotren.es) y Ferrocarril Cafetero (Revista SMP Manizales). UN 2021.

Esta propuesta de infraestructura estratégica que articularía la Hidrovía del Magdalena con el Corredor Férreo del río Cauca, e inscrita en el Plan Nacional de Desarrollo 2014/2018, es financiable con la salida de 30 mil toneladas diarias de carbón andino de alta calidad a la cuenca del Pacífico. Incluye el Túnel Cumanday de 42 km para cruzar la Cordillera Central, donde además de una línea férrea entre La Dorada y el Km 41 con pendiente no mayor 3%, cruzaría la Transversal de Caldas por una ferrovía. La viabilidad de este proyecto, supone el corredor logístico del río del Cauca, que depende de una nueva variante férrea por Loboguerrero, para acceder a Buenaventura con túneles y viaductos en lugar de remontar la cordillera por La Cumbre con graves limitaciones de carga, al igual que de la extensión del Ferrocarril del Pacífico hasta Urabá de la misma forma, para acceder con tren al complejo portuario antioqueño, donde Medellín reduce en un 40% la salida al mar respecto a Cartagena.

Como fundamento, el país antes que poner a competir río, ferrocarril y carretera a lo largo del Magdalena, debe consolidar trenes e hidrovías como modos que, al reducir fletes un 50 y 25% respecto a la tractomula, incrementan las exportaciones e importaciones cinco veces dicha economía modal.

Aeropuerto del Café


Imagen 8: Aeropuerto del café: alcance transoceánico y posición geoestratégica en Colombia.

Según la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles, desde Aerocafé con pista larga podrían salir aviones Jumbo con 112 mil libras de carga, contra 75 mil desde Río Negro y 83 mil desde Bogotá. Con dicha ventaja se podría operar Aerocafé desde el Triángulo de Oro de Colombia, con una oferta de fletes en su orden un 49% y un 36% más económicos, desempeñándose con funciones de aeropuerto Low Cost y de carga pesada, y como atractor sobre Panamá, Caracas y Quito, para resolver las limitaciones de El Dorado, aeropuerto desde el cual un Jumbo no puede salir full Carga, Pasajeros y Combustible, lo que explica las escalas para tanquear en Caracas y Guayaquil.

Siendo así, la importancia de Aerocafé si es que se desarrolla a su máxima expresión con un tamaño que no tienen los aeropuertos del Eje Cafetero, de conformarse un nodo logístico con una función emisora y/o receptora de diferentes orígenes/destinos con alcance transoceánico, además de crear condiciones para una plataforma logística en el modo aéreo, puede convertirse en el aeropuerto que hará viable, entre otros desarrollos, el turismo del Eje Cafetero y la consolidación de la Ciudad Región en un área ya conurbada de facto. Como referente, mientas el cultivo del café representa el 0.8% del PIB nacional, en Costa Rica el turismo aporta el 10% al PIB y a la generación de empleo

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El PCC de Colombia

Imagen 9: Paisaje Cultural Cafetero de Colombia: Obras de Luis Guillermo Vallejo.

Para comprender los conflictos socioambientales y orientar la gestión del hábitat en la ecorregión cafetera, resulta fundamental partir de los derechos bioculturales que amparan tanto a las comunidades como a los ecosistemas del territorio, bajo los preceptos de la declaratoria del Paisaje Cultural Cafetero PCC de Colombia, y a la luz de las trascendentales decisiones que ha tomado la Corte Constitucional de Colombia sobre la materia.

Lo anterior amparado en los atributos que soportan la declaratoria de este Patrimonio de la Humanidad, también obligará a comprender el territorio como una construcción social e histórica, para enfrentar una crisis estructural que se explica por un modelo de desarrollo como el que conocemos en el sector cafetero, con sus monocultivos de base química, el que ahora se clona con las aguacateras, ya que la suerte de los pequeños poblados cafetaleros dependerá de la salud del suelo y del agua, del sombrío para la biodiversidad, como también del bioturismo sumado a la venta de servicios y bienes que expresen nuestro patrimonio cultural y natural.

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Ciudad Región

10- Ciudad Región del Eje Cafetero y Sistema de Ciudades en Colombia.

A nivel global, mientras los países de occidente recurrieron a la revolución de la vivienda para fortalecer la demanda agregada desde la postguerra, China lo ha venido haciendo con la revolución urbana conformando sistemas de ciudades para complementar sus economías. Igualmente, ahora la integración para conformar clústeres urbanos es la tendencia en Europa.

En el Eje Cafetero, además de estructurar un nuevo ordenamiento territorial considerando las interacciones metropolitanas del territorio en el mediano y largo plazo, y complementando las economías subregionales en lugar de competir, se deberá fortalecer la movilidad y la conectividad para desarrollar un mercado integrado de mayor capacidad. Así entonces, las capitales del Eje Cafetero pueden conformar un clúster urbano de 1,8 millones de habitantes mediante una integración horizontal de especialización flexible, que además de generar masa crítica en sectores como atractores de la inversión extranjera, fortalezca sus economías previendo las relaciones metropolitanas que se ejercerán desde Cali y Medellín conforme avanza la conectividad vial, para convertir en oportunidades las relaciones dominantes y su posición geoestratégica.

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Opciones del territorio.

Imagen 11: Los Mundos de Samoga: D.V. Carolina Calderón Franco. U.N. Sede Manizales.

Para la ecorregión cafetera, donde la economía antes dependiente del café, ahora se ha tercerizado, entre las opciones para un crecimiento con desarrollo, estarían estas.

1- En primer lugar, potenciar el sector terciario, donde la principal barrera podría ser el factor educativo, dado que el nivel de escolaridad de nuestra población sólo supera los 4 años en la zona rural y los 10 años en la urbana; dificultad para la cual los programas Escuela Nueva, Escuela Activa Urbana y Universidad en el Campo, al igual que el desarrollo de la conectividad digital, resultan claves. Y a futuro, el fortalecimiento de la economía verde y naranja, gracias a la expansión de las TIC cuya red cubre el departamento, aunque con deficiencias para el sector rural, con lo cual no sólo se crearán más oportunidades para acceder a programas de formación superior desde la provincia, sino también para la oferta de bienes y servicios que expresen el potencial natural y cultural del territorio, desde dichos lugares.

Mientras en Colombia el aporte del turismo al PIB 2005 fue del 2,3%, a nivel mundial llegó al 10,6% generando uno de cada ocho empleos. Igualmente, la economía naranja tiene una participación del 3,3% en el PIB, cuantía cuatro veces superior a la del cultivo del café (0,8%).

2- En segundo lugar, gracias al carácter biodiverso y a la posición geoestratégica de la Ecorregión Cafetera, las claves estarían en la biotecnología y en la intermodalidad.

De un lado con el Ferrocarril Cafetero articulando la hidrovía del Magdalena extendida al Tolima Grande, y el Corredor Férreo del Cauca integrando a Urabá con Buenaventura, se puede hacer viable el desarrollo de industrias pesadas destinadas a transformar la riqueza del subsuelo, haciendo uso del potencial carbonífero e hidroenergético del territorio, y de los yacimientos propios y vecinos. Habrá que prospectar y valorar estos recursos mineros para garantizar, por 25 años como mínimo, la materia prima para las correspondientes plantas de transformación, con las cuales el PIB del país podría crecer 0,4%. Adicionalmente, gracias al carácter biodiverso del territorio, con su variedad de pisos térmicos, la biotecnología puede facilitar la creación de invaluables productos y servicios, aplicada a los procesos en el sector agrícola y acuícola, a la salud y al sector industrial, donde se requiere el aporte científico y tecnológico de la bioquímica, la microbiología, la ingeniería química, la medicina, la agronomía y la agrología, entre otros saberes.

3- Y finalmente, los temas del hábitat y el Ordenamiento Territorial, dada la compleja interacción entre el medio natural y la cultura en este ambiente tropical caracterizado por mosaicos de ecosistemas, con sus determinantes biofísicas, donde temas como la amenaza sísmica e hidrogeológica que imponen retos para su desarrollo y evolución, demandan acciones para garantizar la pervivencia sostenible y armónica en los medios rurales y urbanos, y mejorar el nivel de vida de la población bajo una perspectiva biocéntrica que repete los derechos bioculturales del territorio.  

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Epílogo


En la Dimensión Humana y Social, se debe ubicar a las personas en el centro del desarrollo: para el desarrollo rural y en general de la provincia, la inequidad y la pobreza, la carencia de vivienda y de salud, la brecha educativa y de ingresos, la drogadicción, la exclusión y la violencia de género, la delincuencia y el desempleo, son entre otros los temas centrales y los grandes desafíos.

•En la Dimensión Medio Ambiente y Territorio, soportar la sostenibilidad en la responsabilidad social y ambiental y en la gestión integral del riesgo. La asociatividad soportada en sinergias territoriales, y el transporte rural como catalizador de la reducción de la pobreza, además de las barreras asociadas a la condición mediterránea del territorio, la conectividad de la ecorregión y del Eje Cafetero, son otros desafíos.

•En la Dimensión Producción e Ingresos, priorizar la formación del capital social sobre el crecimiento económico, y desarrollar políticas de Ciencia, Tecnología y Cultura como estrategias para cerrar la brecha de productividad.

•En la Dimensión Cultura y Educación, el desarrollo de la identidad cultural y de la civilidad como valor supremo de la cultura urbana, e implementar un nuevo modelo educativo de cara a la sociedad del conocimiento.

•En la Dimensión Político Institucional, fortalecer la apropiación social de los procesos de intervención del territorio, como los procesos de gobernanza, de paz, de desarrollo institucional y de lucha contra la corrupción, con el concurso de la sociedad civil y ONG.

La participación en el POT de los actores sociales estratégicos y comunidades de base, y los modelos de gestión del territorio entendido como el resultado de procesos sociales e históricos, resulta fundamental.

Se requiere un esfuerzo coordinado en Políticas Públicas relacionadas con estrategias y acciones de planificación y ordenamiento del territorio no solo entre la capital caldense y el departamento, sino también a nivel de la RAP del Eje Cafetero, para implementar proyectos estratégicos de desarrollo económico y social para la Cultura y el Medio ambiente, entre ellos un Plan Maestro de Turismo que incluya El Paisaje Cultural Cafetero y la conformación e integración de las Áreas Metropolitanas como paso previo para la consolidación de la Ciudad Región del Eje Cafetero.

•Se requiere priorizar el sector rural y corregir el modelo conflictivo de ocupación del territorio, buscando satisfacer la función social y ecológica de la propiedad, desarrollando instrumentos de gestión y de desarrollo comunitario para lograr una intervención que le apueste a la conservación ambiental e hídrica, y a la preservación de la cultura local y el rescate de los bienes patrimoniales culturales y naturales.

•Para lo anterior, además de educación, formación, capacitación e investigación, se debe fortalecer la institucionalidad y formular de forma participativa los planes de manejo correspondientes.

Urge reforestar las cuencas abastecedoras de agua y resolver los conflictos entre uso y aptitud del suelo, no solo en los medios rurales sino también en los urbanos donde igualmente se presiona la estructura ecológica del territorio, caso RFP de Río Blanco y Chec con el proyecto urbanístico de La Aurora y la Mina de Tolda Fría.

Ahora que avanzan las consultas populares mineras en Caldas, como instrumentos que deben garantizar la autonomía territorial y la democracia participativa, ¿por qué no exigir la institucionalidad del proceso de consulta creando un órgano técnico consultivo departamental de carácter participativo y permanente, donde concurran expertos representativos de los actores sociales del territorio? Lo anterior para incorporar de forma adecuada en el POT las áreas de actividad minera que resulten viables y para prevenir los mecanismos de consulta sin base social representativa en procesos que temporalmente superan un mandato.

• Urge una gestión integral soportada en estrategias de gobernanza para la preservación del patrimonio hídrico, donde además de las aguas superficiales y las subterráneas, se contemplen el saneamiento básico y la cobertura del servicio en los medios rurales y urbanos.

• Según el IDEAM, con el cambio climático los principales efectos podrían presentarse en los sectores de infraestructura vial y cuencas deforestadas en zonas de alta pendiente, debido al aumento de precipitación y precaria regulación hídrica.

Habrá que corregir siglos de olvidos e incumplimientos sistemáticos en el territorio, invisibilizando referentes sociales y culturales, y sometiendo a la provincia a los impactos de la falta de una planeación abierta y participativa, y a un modelo de intervención territorial de corte utilitarista emprendido por el Estado y actores económicos extraños, lo que exige además de la reparación de los daños causados, el reconocimiento de la urgencia que amerita la solución de la grave problemática socioambiental del territorio caldense, fortaleciendo su apropiación social.

•Bajo la premisa de que existe una brecha entre la acción del Estado y los derechos bioculturales del territorio, dada la evidente posibilidad de avanzar en la construcción de un plan de acción integral y concertado con propuestas viables y sostenibles de mediano y largo plazo, fruto de un trabajo mancomunado de todos los actores sociales, se deberá priorizar una política pública soportada en dicha filosofía, para que mediante dicho plan de acción se resuelvan las graves afectaciones que padecen las diferentes regiones de Caldas.

De contarse con la voluntad política que no se ha tenido y con una política pública de alto contenido social y ambiental, ¿cómo proceder para la ejecución del plan de acción y para verificar su cumplimiento?: se deberán implementar un grupo motor conformado por representantes de las regiones, de los sectores comunitarios, gremiales y académicos, y otro de veeduría ciudadana con participación de líderes cívicos, comunales y ONGs.

Siendo la idea el desarrollo, y no un crecimiento a costa del medio ambiente y la miseria de la gente, entonces: ¿cómo construir un medio transformado o paranatural, ecológicamente sólido y compatible con la cultura?

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*Gonzalo Duque-Escobar, Profesor de la U.N. de Colombia Sede Manizales. Ponencia en la: Jornada Temática desarrollada por el Vicerrector de Sede Dr. Neil Guerrero González. Julio 22 de 2021. Portada: Los Mundos de Samoga: D.V. Carolina Calderón Franco. U.N. Sede Manizales. Portada: U.N. de Colombia, Sede Manizales. Campus Palogrande.

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Fuentes Bibliográficas

Agua pasó por aquí, cate que no la vi. Gonzalo Duque Escobar (2021). Museo Samoga. Manizales.

Agua y Clima en Colombia. Gonzalo Duque-Escobar (2020). Semana Ambiental de Corpocaldas, Manizales.

Área Metropolitana de Manizales. Gonzalo Duque Escobar (2019) In C de C de Chinchiná y Consejo de Planeación Territorial de Chinchiná.

Colombia Intermodal: Hidrovías y Trenes. Gonzalo Duque-Escobar (2020) Universidad Nacional de Colombia Manizales.

Colombia, por el regreso del tren. Gonzalo Duque Escobar (2021). Universidad Nacional de Colombia.

CTS, Economía y Territorio - Gonzalo Duque Escobar (2018) Universidad Nacional de Colombia.

Ecorregión Cafetera: evaluación ambiental del territorio. Gonzalo Duque Escobar (2021). In: “Quehacer Cultural”, Manizales.

Dinámica económica del Eje Cafetero. Duque-Escobar, Gonzalo (2020). U.N. de Colombia.

Economía colombiana: crisis y retos. Gonzalo Duque Escobar (2020), Universidad Nacional de Colombia, Sede Manizales.

Ecorregión Cafetera: Minería y Medio Ambiente. Gonzalo Duque Escobar (2021). Contexto en CTS de la U.N. de Colombia, Manizales.

Eje Cafetero: Aeropuerto del Café y Ciudad Región. Gonzalo Duque Escobar (2021). U.N. de Colombia, Manizales.

Eje Cafetero: retrospectiva y prospectiva del desarrollo. Gonzalo Duque-Escobar (2020) Curso de Análisis de la Realidad Territorial U.N. de Col.

El desarrollo urbano y económico de Manizales. Gonzalo Duque-Escobar (2015). Bus del POT, In: SMP Manizales.

El Ferrocarril Cafetero. Gonzalo Duque Escobar (2019). Universidad Nacional de Colombia - SMP Manizales.

El territorio caldense: ¿un constructo cultural? II Encuentro de saberes Dachi Kuita: el valor público como construcción de paz”, ESAP. Manizales.

Integración territorial en el Eje Cafetero. Gonzalo Duque Escobar (2021). Contexto en CTS de la U.N. de Colombia, Manizales.

La trama de la vida: bases ecológicas del pensamiento ambiental. Augusto Ángel Maya (1993) Mineducación Colombia.

La U.N. en Manizales construyendo Ciudad y Región. Gonzalo Duque Escobar (2016) “Cátedra José Félix Patiño” Contexto U.N. Sede Manizales 2016.

Paisaje Cultural Cafetero PCCC: disrupciones y derechos bioculturales. Gonzalo Duque Escobar (2021). In: Sesión Plenaria de la Honorable Asamblea Departamental de Caldas.

Preservación Ambiental e Hídrica dentro de la Declaratoria del PCC de Colombia. Duque Escobar Gonzalo (2019). Encuentro Regional. Teatro Fundadores. Manizales.

Retos ambientales y logísticos en la hidrovía del Magdalena. Gonzalo Duque Escobar (2021). Contexto en CTS de la U.N. de Colombia, Manizales.

UMBRA: la Ecorregión Cafetera en los Mundos de Samoga. Duque-Escobar, Gonzalo (2015). Museo Interactivo Samoga. Universidad Nacional de Colombia Sede Manizales.

 



martes, 20 de julio de 2021

Ecorregión Cafetera: Minería y Medio Ambiente

 Ecorregión Cafetera: Minería y Medio Ambiente




Por: Gonzalo Duque-Escobar*


Ahora que avanzan las consultas populares mineras en Caldas, como instrumentos que deben garantizar la autonomía territorial y la democracia participativa, ¿por qué no exigir la institucionalidad del proceso de consulta creando un órgano técnico consultivo departamental de carácter participativo y permanente, donde concurran expertos representativos de los actores sociales del territorio? Lo anterior para incorporar de forma adecuada en el POT las áreas de actividad minera que resulten viables y para prevenir los mecanismos de consulta sin base social representativa en procesos que temporalmente superan un mandato.

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Imagen. Colombia: Territorios indígenas V.S. Títulos mineros. https://geoactivismo.org / y Yacimientos mineros, en www.mpdi.com

Preámbulo

Sabemos que, desde el punto de vista del bien explotado, la minería no es sostenible, dado que el recurso extraído no se recupera; no obstante, podemos hablar de una minería limpia, socialmente responsable, y que sea productiva transformando la materia prima, si en lugar de enclaves económicos optamos por apalancar el desarrollo, y como tal por el respeto de los derechos bioculturales del territorio y por el desarrollo tecnocientífico de nuestras fuerzas productivas. Esta premisa, que resulta fundamental para el caso de América Latina y Colombia, dado que la región tiene una participación relevante en las reservas mundiales de los principales minerales metálicos, también aplica al Eje Cafetero donde, según el inventario minero de Ingeominas (1974), se da razón de 120 yacimientos distribuidos así: 124 en Caldas, 60 en el Quindío y 36 en Risaralda.

América Latina se ha convertido en destino importante de inversiones para la explotación minera. Junto con la abundancia de minerales, la región ofrece condiciones atractivas para empresas extractivas, lo que explica el crecimiento de las exportaciones de materias primas mineras, que en peso casi se duplicaron en los últimos 20 años. De acuerdo con datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe -CEPAL, Chile es el principal productor de cobre, Brasil el tercero de hierro, México el mayor productor de plata, y Perú está entre los primeros de plata, cobre, oro y plomo. No obstante, con la pandemia han caído las inversiones extranjeras en Latinoamérica un 45%, por encima del 35% de la media mundial según la ONU.

 

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América Latina

Imagen: Izq. Incidencia económica y potencial de la minería en América Latina. https://revistas.udca.edu.co/ Der: producción de minerales 2005-2018, en millones de toneladas métricas. https://es.statista.com/    

En Latinoamérica, donde la extracción ha aumentado 6 veces entre 1970 y 2017, Brasil, Chile, México y Perú concentran el 85% de las exportaciones de minerales y metales a nivel global; y así se haya ganado participación en las reservas de oro, plomo, níquel, plata y zinc, y se haya perdido en cobre, litio, hierro, estaño, bauxita y alúmina, a nivel mundial cuenta con el 61% de las reservas de litio (Chile 48,2% y Argentina 12,8%). Adicionalmente el flujo de ingresos de inversión extranjera directa IED en minería, se concentró en Chile (40%), Brasil (24%), México (15%) y Colombia (14%).

Ahora, así en la producción aurífera el rol de América Latina sea discreto, para entender el caso colombiano, aunque el país aparezca sólo en el puesto 21 como productor del preciado metal, se requiere conocer el contexto regional del sector, ya que entre 2016 y 2019 con 45 toneladas de oro como promedio anual, a nivel de Latinoamérica somos el quinto productor, superados sólo por Perú, Brasil, México y Argentina, lo que significa que contamos con un PIB minero donde el sector metalífero no sólo ofrece posibilidades significativas, sino que también enfrenta grandes desafíos.

En primer lugar, así como en América Latina y el Caribe las nuevas tecnologías de extracción minera, especialmente las que conllevan cianuro y ácido sulfúrico son las que más afectan territorios y comunidades por el alto impacto sobre recursos vitales como el agua y la biodiversidad, en Colombia con el mercurio en actividades extractivas ilegales ocurre lo mismo; de ahí la represión de las protestas comunitarias ante proyectos mineros que generan conflictos socio-ambientales en América Latina, donde las manifestaciones se enfrentan con represión, criminalización y judicialización de la protesta.

Segundo, para advertir las características del subdesarrollo, basta mirar la composición promedio 2015-2017 del valor de las exportaciones de minerales y metales, por grado de elaboración y por regiones, para comprender la vulnerabilidad al deterioro de los términos de intercambio. Para América Latina y Caribe: Productos Primarios (PP) 37%, Productos Semielaborados (PS) 43% y Productos Elaborados (PE) 20%; para África: PP 21%, PS 57% y PE 23%; contrariamente para EE UU y la Unión Europea PP 6 y 3%, PS 43 y 26% y PE 51 y 71%; y para el mundo: PP 9%, PS 38% y PE 53%.

Y tercero, las fluctuaciones fiscales por la volatilidad de los precios de productos con bajo nivel de transformación en estos países minero-dependientes. Según la CEPAL, los ingresos tributarios y no tributarios por explotación de minerales en lo corrido del siglo variaron dramáticamente, alcanzando mínimos de 0,20% en 2002 y 0,25% en 2016, y máximos de 1,58% en 2007 y de 1,35% en 2011. Como referente, durante el boom de 2007, dichos ingresos en Colombia tuvieron una participación del 0,5% en el PIB, y en el caso de Chile donde las concesiones son regresivas al privilegiar el mercado por sobre la propiedad del Estado, aportaron 8,1% al PIB.

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El caso de Colombia


Imagen: Colombia Izq. Regalías por producto minero. Der: Exportaciones y PIB Minero 2010-2020. https://www.valoraanalitik.com/

Entonces: ¿qué hacer en el país para sortear los devenires en materia fiscal, prevenir situaciones de enclaves mineros, y evitar conflictos en los que las explotaciones ilegales pasan factura al medio ambiente y comunidades que sufren desplazamientos y la desaparición de sus líderes? La respuesta es simple; habrá que fortalecer el Estado para lograr metas en crecimiento, pero con desarrollo, lo cual exige no sólo una minería legalizada con equidad social y ambientalmente responsable, sino también con valor agregado, y que parta de la gobernanza minera y del respeto de los derechos bioculturales en los territorios.

El conflicto en la minería asociado a confrontaciones entre modelos de sostenibilidad ambientales, puede ser visto desde perspectivas sociales, ambientales y políticas, entre otras. Así, por ejemplo: los grandes conflictos de Colombia, pasan por los temas energéticos, mineros y de infraestructura. Igualmente, una de las locomotoras del Plan de Desarrollo “Prosperidad para todos”, contempla la minería. Y dado que en las últimas décadas el sector minero se ha caracterizado por sus graves problemáticas ambientales y sociales, tras haber “ablandado la legislación ambiental” para atraer la inversión extranjera, en Colombia se presenta por el gobierno como fórmula concesionar las áreas mineras del país.

Con la hidrovía del Magdalena extendida al Tolima Grande, y el Ferrocarril del Pacífico entre Urabá y Buenaventura transitando por el Corredor del Cauca, ambos sistemas articulados con el Ferrocarril Cafetero, es viable desarrollar las hidrovías y trenes en la región andina, para exportar commodities en lugar de materias primas por sendos corredores logísticos de Colombia, gracias a la calidad y abundancia del carbón colombiano que podría ser exportado, pese a un escenario de precios bajos en los energéticos, del agotamiento del petróleo y de las restricciones a los combustibles fósiles por el calentamiento global.

Si en razón al cambio climático a nivel mundial habrá que reducir durante las próximas décadas el 80% del carbón, la mitad del gas y un tercio del petróleo, como quiera que en Europa sólo quedan las turberas tras décadas de explotación y agotamiento, Colombia tiene una oportunidad para exportar un carbón de calidad dadas sus voluminosas reservas, por lo menos en los próximos 40 años.

En la oferta mundial exportable de carbón térmico durante 2013, Colombia ocupó el sexto lugar con un volumen exportado de 46 Mt, correspondiente al 8,61% del total mundial exportado. Ya en 2020, por factores como la pandemia con 49.5 millones de toneladas pasó al quinto lugar, contra 82.4 millones de toneladas del año 2019. Según la UPME, las reservas medidas del país suman 6.648 millones de toneladas (MT) medidas: en efecto se trata de un carbón duro, de alto poder calorífico y bajo contenido de azufre. De ellas, la del carbonífero de Antioquia que  involucra a la Ecorregión Cafetera, cuenta con 90 MT de un carbón de 5000 calorías por kilogramo, mineral subbituminoso que se califica como combustible térmico clase 1A; las de la costa norte colombiana explotadas por el Cerrejón (3.670 MT) y la Drummond (1538 MT), empresas que juntas exportan 60 MT año, al igual que las existentes en Córdoba estimadas en 381 MT, son de 6000 calorías por kilogramo, y finalmente el mineral de Boyacá–Cundinamarca cuyas reservas suman 412 MT, es aún mejor: 7000 calorías por kilogramo.

 

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El caso del Eje Cafetero

Imagen: Dinámica del PIB en el Eje Cafetero 1976-2010. JI Morales G. In Blog de GDE.

En Caldas, donde al 2021 se han otorgado 367 títulos mineros en 26 de los 27 municipios, y actualmente se tienen 262 solicitudes de propuestas de concesión, para la Agencia Nacional de Minería 42 equivalentes al 16 % de las propuestas, que tienen viabilidad técnica, fueron viabilizadas. Actualmente los principales minerales explotados en el departamento, son metales preciosos, materiales de construcción y, en menor proporción, asfaltita, piedra caliza, mármol y arcillas: los escenarios que históricamente han  merecido atención, son: Marmato, un pueblo colonial anclado en la montaña y situado en la vertiente occidental del río Cauca sobre el macizo de los Mellizos de la cordillera Occidental, y el sector de la mina de Tolda Fría ubicada en la Vereda Montaño, adscrita al Distrito Minero Manizales-Villamaría, vecina al PNNN y a la Reserva Forestal Protectora de Chec, cuyo sistema de explotación subterráneo, al llegar la gran minería industrializada, con las perforaciones profundas penetrando la cuenca hidrogeológica, logrará alterar la dinámica y dirección del flujo subterráneo conectando estructuras geológicas permeables, y comprometer con ello fuentes de agua y ecosistemas de áreas protegidas vitales en cuencas hidrológicas vecinas.

En las microcuencas de la Q. Manizales y la Quebrada La María existe minería casi desde la fundación de la ciudad. A pesar de la vecindad al Parque Nacional Natural de los Nevados y a la primera fuente de agua de Manizales (Q. Gallinazo), una pequeña minería, limpia y de carácter artesanal, puede resultar viable en caso de incorporar prácticas amigables con el medio ambiente. Igual ocurre con Marmato: donde cientos de familias de etnias mayoritariamente negras, mulatas e indígenas cuya historia cruza páginas enteras de la historia del oro en Colombia, podrían quedar sin pasado ni futuro en caso de perder sus raíces ancestrales y culturales, para dar paso a la gran minería de cielo abierto. Actualmente, con la prórroga de 30 años del contrato a la minera Caldas Gold en este poblado que es el cuarto municipio más viejo de Colombia, su producción anual de 24.000 onzas de oro se podrá doblar, y triplicar la de plata que llega a 30.000 onzas al año. Soportados en la cultura del alto occidente de Caldas, los marmateños pueden reconvertir su actividad implementando una minería asociativa, limpia y con valor agregado.

Para elevar el PIB del sector primario en el Eje Cafetero, transformando en commodities estratégicos algunos minerales, entre otros las jaguas y fraguas del oro, las calizas que afloran por Neira y en Victoria, o las arenas silíceas y el manganeso del Eje Cafetero, se requiere hacer uso del importante potencial hidroenergético de Caldas y Risaralda, implementar dos plataformas logísticas equipadas de polígonos industriales y zonas francas en los nodos logísticos del Magdalena Centro y del Corredor del Cauca, construir el ferrocarril Cafetero entre La Dorada y el Km 41 para integrar ambos nodos logísticos, y detonar la locomotora del carbón andino para financiar el desarrollo ferroviario y proveer de carga la hidrovía del Magdalena.

Como quiera que el Eje Cafetero cuenta con 220 explotaciones y depósitos metalíferos y no metalíferos, y de minerales preciosos y no preciosos, dicho potencial - cuyas reservas según el “Plan Minero-Industrial de Caldas 2006-2016” requieren estudios de cuantificación y caracterización-, podría aprovecharse para obtener commodities estratégicos que provendrían de varias plantas ubicadas en el Magdalena Centro y Corredor del Cauca vecino al Eje Cafetero, de contarse con el sistema ferroviario y la hidrovía del Magdalena como modos de transporte, y del aprovechamiento responsable del potencial hidroenergético aún por explotar con proyectos a filo de agua en la cuenca del San Juan (Risaralda) y el Oriente Caldense, dos escenarios excedentarios en aguas superficiales y subterráneas. Al respecto, debo añadir que, mientras las empresas manufactureras del país encuentran opciones emplazadas en los puertos y no en las regiones mediterráneas, las de transformación de materias agrícolas y mineras deben quedar cerca de las fuentes proveedoras de la materia prima, por razones logísticas.

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El Plan Minero Energético de Caldas



Imagen: Extractivismo minero, biomas y usos del suelo, en Caldas. Web Catastro Minero Colombiano y Corpocaldas. En Extractivismo y Corpocaldas.

El Plan Minero Energético de Caldas 2006-2016, elaborado por el eminente investigador Gabriel Poveda Ramos, rescata la existencia de filones de oro interesantes en Manizales, Manzanares, Marmato, Riosucio y Supía, y agrega que de las jaguas de los beneficios y de las gangas de las explotaciones de estos y otros lugares -caso Pensilvania y Samaná-, se podría obtener apreciables cantidades de sulfuros de zinc, de plomo, de hierro, de cobre, de antimonio y de arsénico, o de zinc metálico y sus derivados. Y sobre el manganeso de Apía y Viterbo, el investigador califica el yacimiento minero-metálico como el más importante de Caldas, y considera su eventual aprovechamiento. Similarmente, señala la existencia de arenas silíceas de alta pureza en cuarzo (SiO2) en Pueblo Rico y el Valle del Cauca, y posiblemente en el distrito minero Riosucio-Supía-Quinchía, a las que sumaría las de Cerro Bravo, materiales que podrían explotarse y complementarse con otras de Antioquia y Tolima para implementar industrias de transformación en silicato de sodio, sílice-gel y carburo de silicio.

Adicionalmente, entre los principales prospectos para el Plan Minero de Caldas 2006-2016, se consideran los materiales calcáreos al anunciar que parece inferirse una inmensa cadena de yacimientos de calizas en el oriente caldense, que parte desde el centro de Tolima y llega al nordeste de Antioquia, y cuyos mayores prospectos requieren ser ubicados, al igual que los existentes en la otra vertiente de la cordillera entre Manizales y Aguadas. De los yacimientos de caliza y mármol de las dos franjas calcáreas que recorren a Caldas de Sur a Norte: la de La Victoria-La Dorada-Río La Miel, y la de Neira-Aranzazu-Salamina, aforando su calidad, dispersión y cantidad, podrían proveerse materias primas para una industria de carburo y fosfatos fertilizantes, misma que en un plano de mayor nivel de desarrollo daría origen a plantas de acetileno, cianamida, cloruro químicamente puro y cemento.

En Caldas, no existen zonas declaradas para comunidades étnicas, ni solicitudes en trámite. Igualmente, en cuanto a áreas de Reserva Especial, aunque al 2017 no se registraba ninguna declarada en el departamento, aparecían 11 áreas de Reserva Especial en trámite.

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Epílogo



Imagen: Exportaciones colombianas de commodities y no commodities 2005-2018. Anif en https://gerente.com/co/

Entendido el territorio como un sujeto de derechos, la ecorregión del Eje Cafetero, donde persisten: 1- la amenaza por factores mineros tanto legales como informales; 2- la sobreexplotación del patrimonio hídrico, en especial para el uso hidroenergético o las dinámicas de la agroindustria – como el caso del aguacate-; y 3- la expansión urbana tal cual se advierte en la ZFA de Río Blanco, es un frágil territorio que, en el marco del cambio climático y de la profunda crisis cafetera, requiere de políticas de especial protección, razón por la cual se propone expandir las áreas de interés ambiental y declarar PNN las cuencas altas del Río Quindío y del Chinchiná – Guacaica, al igual que la declaratoria del PCC de Colombia como Sujeto de Derechos bioculturales.    

El Eje Cafetero como corredor ambiental con sus ecosistemas cafetero y de páramo, con su vocación agropecuaria comprometida por conflictos del uso del suelo, y donde su potencial bioturístico y ecológico se subraya por la biodiversidad y las áreas de interés geológico y paisajístico, exige el aprovechamiento del amplio marco constitucional para lograr protección de su patrimonio natural y cultural, como factores fundamentales para la pervivencia de la vida y la cultura, haciendo del medio ambiente un elemento estratégico para el desarrollo humano, social y económico.

Al examinar el alto impacto de la producción de oro y plata en el Eje Cafetero, sobre la estructura ecológica de soporte para el desarrollo agroindustrial y turístico del territorio, debe reclamarse no solo una mayor gestión de los entes de controles de los organismos de inspección y vigilancia del Estado -ya que parecen haber sido permisivos con las dinámicas y el desarrollo de las actividades mineras-, sino también la participación de la comunidad académica aportando pensamiento crítico para facilitar los procesos de apropiación social y defensa del territorio por parte de las comunidades de base que lo habitan.

Para esta situación conflictiva, habrá que subrayar la inconveniencia no solo de la política ambiental del gobierno nacional materializada en el Plan Nacional de Desarrollo, sino también de una legislación que se ha adaptado a los propósitos de la economía extractiva, donde el crecimiento económico que prima sobre el desarrollo, se soporta en la generación de ingresos y mayor rentabilidad de los recursos mineros, a costa de los ecosistemas y de la cultura que caracteriza la ecorregión cafetera.

Y en cuanto a las consultas populares mineras, como instrumentos que deben garantizar la autonomía territorial y la democracia participativa, la Sentencia SU-095 del 2018 de la Corte Constitucional, además de señalar que los títulos mineros no dan un derecho ilimitado sobre el aprovechamiento de los recursos naturales, también deja sin validez la participación ciudadana cuando se trate de la prohibición o regulación de la actividad minero energética en los entes territoriales, donde existen competencias concurrentes entre los municipios y la Nación.

Al respecto, el instrumento de coordinación entre las autoridades nacionales y locales, es el plan de ordenamiento territorial POT, puesto que allí concurren ambos niveles de autoridad, toda vez que para el sometimiento del POT ante los concejos municipales, se debe contar con la autorización previa de la respectiva corporación autónoma regional como autoridad con funciones delegadas del Ministerio de Ambiente. Siendo así, para prevenir los mecanismos de consulta sin base social representativa en procesos que temporalmente superan un mandato, ¿por qué no exigir la institucionalidad del proceso de consulta creando un órgano técnico de consulta departamental de carácter participativo y permanente, donde concurran expertos representativos de los actores sociales del territorio? 

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Gonzalo Duque-Escobar, Profesor de la Universidad Nacional de Colombia Sede Manizales. http://godues.webs.com Documento del Museo Interactivo Samoga; Manizales, Julio 20 de 2021. Portada: Valle de Cocora- Salento, Quindío.

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